HILANDEROS - Ecuador-

¿Que tres meses pasan volando? puede ser.

Estos meses han sido una locura en cuanto al tiempo y al trabajo. Conciertos en la Casa Cultural Trude Sojka, en el Teatro Prometeo, en la Plaza de San Francisco homenajeando a la libertadora Manuela Sáenz; grabando música para cine en los estudios "La Clave del Apu" del maestro Mauricio Vicencio y, como si fuera poco, grabación de nuestro CANTOS DEL CAMINO en los estudios de Acosta Producciones por Ramiro "Negro" Acosta, gran ingeniero de sonido, virtuoso guitarrista y, para fortuna,nuestro amigo. Nos acompañó también Catalina Restrepo quien alegró los últimos días de marzo con su buena energía y su cálido violín, y nuestro nuevo amigote Cristian "Oso" Cabrera, técnico de sonido, con oídos atentos, sonrisas y aguardiente para calentar las tardes de muchísimo frío en Quito.

Inmersos en el vértigo propio del trabajo y la altura, asistimos al concierto del gran Rubén Blades, dos horas y media frente a un artista que llena la vida de colores, reivindica a los olvidados, y nos colma de poesía. Compartimos el vino, las humitas, el maíz tostado, la fritada, locro de queso, hornado, los bolones de verde y la música en casa de Consuelo y su familia, Patricio, Mónica, Nayarit y el nuevo heredero; con Marcela, Manolo y sus niños; chocolate y queso con Martha Sofía. Construimos nuevos sueños en medio de cantadas, vinos y poesía con nuestros hermanos colombianos Margarita, Diego, Oscar y Laura, que están trabajando duro por Colombia. Noches de reflexión, de fiesta, de nostalgia y sobretodo de recargas anímicas para seguir caminando.

Bien, es hora de nuestro primer regreso a casa, está pronto a nacer nuestro CANTOS DEL CAMINO que es nuestro álbum de viaje, que es nuestra forma de celebrar la amistad, que es otro paso, que es otro abrazo, que es la reafirmación de un sueño; nos vemos entonces en los próximos conciertos, cantando de nuevo en nuestra tierra amada.